Si bajamos por la pirámide de cronicidad, hasta los cimientos, encontramos la promoción de la salud para prevenir las enfermedades crónicas y retrasar la discapacidad. En Cataluña, este aspecto ya se ha ganado un espacio importante en el actual Plan de Salud y tendrá más en el próximo. Estamos en el inicio de un cambio cultural que nos llevará a un cambio de hábitos, por una vida más activa y menos sedentaria. Sabemos, sin embargo, si cada uno mira a su casa, que la adherencia es un reto: de hecho la actividad física, en una sociedad que no la contempla, se ha convertido en un deber y en una responsabilidad, que, como consecuencia, sin un retorno muy tangible e inmediato, es difícilmente sostenible. El reto es mayor en los ancianos, que pueden tener menos capacidad de adaptación al cambio y acumular problemas de salud y limitaciones funcionales. Por otra parte, el tiempo libre, del que algunos de ellos disponen, podría ser una ventaja.
La promoción del envejecimiento saludable se puede perseguir con la educación, que ciertamente está penetrando en la sociedad, con la prescripción de programas reglados de ejercicio físico y de una dieta adecuada, por ejemplo, que son recetas adecuadas y necesarias. Pero, si mantener la adherencia es difícil en lo más sencillo como tomar una pastilla, aún lo será más ante un programa de ejercicio. Como se ve, el reto es complejo. Para dar respuestas, podemos seguir con esquemas de mejora continua, basados en "mejorar lo existente", o hacer algo diferente, añadiendo valor. Tal y como postulaba Alfons Cornella hace unos días, en la jornada del Plan de Salud, innovación = ideas + análisis de valor + resultados. Dentro del círculo, restringido, de los innovadores en envejecimiento se encuentra, sin duda, Linda Fried, geriatra y epidemióloga neoyorquina. La Dra. Fried es el tercer autor más citado en el campo de la geriatría y la gerontología y, tras una larga trayectoria en epidemiología geriátrica, fue la primera mujer en el cargo de decana de la escuela de Salud Pública de Columbia University, con el encargo de rediseñar el currículo de la Facultad para dar un nuevo énfasis en el envejecimiento saludable, la preservación de la salud y la prevención. Entre sus "logros" más destacados está la maternidad del concepto de fragilidad, durante su larga estancia en Johns Hopkins, en Baltimore, y la definición operativa consiguiente, en el Cardiovascular Health Study, que resiste como gold standard a distancia de años.