Uno de los retos lanzados por el Presidente de los Estados Unidos, Barack Obama (215 millones de dólares para el 2016), es la "Precision Medicine Initiative", un concepto que va en contra del tratamiento enfocado al "paciente medio". De acuerdo con esta iniciativa, como primer paso, los tratamientos oncológicos se orientarán a la genética específica de la persona. Por ello, en los últimos tiempos, es recurrente hacer referencia al futuro de la oncología como una "medicina de precisión". Continuando con la oncología, de momento, el sistema inteligente Watson (IBM) proveerá apoyo a los oncólogos para una toma de decisiones informada y ajustada, analizando la historia clínica de los pacientes y buscando posibles opciones basadas en la evidencia.
Ante esta perspectiva de "medicina de precisión" casi matemática, y respecto a la atención a personas mayores, a menudo con complejidad multifactorial (debida a la multimorbilidad, a la fragilidad física y cognitiva y a los factores psicológicos, sociales y de entorno), la apuesta debería ser más contundente: las intervenciones, también multicomponente, deben ser individualizadas, planificadas y moduladas en base a múltiples parámetros. A continuación detallo las principales:
- Los aspectos biológicos y clínicos, con la complicación añadida de adaptar una evidencia a menudo derivada de estudios hechos con "pacientes tipo", muy seleccionados
- La vulnerabilidad de la persona y el pronóstico, que a menudo se relacionan con la fragilidad, hoy en día cuantificable con valoraciones más o menos sencillas
- Los factores sociales y de entorno
- Las preferencias de la persona, que, si hemos podido hacer un buen trabajo, se han evaluado en situación de estabilidad
Además, tenemos que hacer todo esto inteligible para compartir las decisiones con las personas y sus cuidadores.
Este paradigma debería ser de aplicación sistemática en la toma de decisiones ante la enfermedad crónica avanzada. También de cara al cáncer, que en 2030 afectará a las personas mayores en un 75% de los casos, esto será clave. Hay que añadir que diferentes intervenciones complejas muy prometedoras, tanto en prevención como en tratamiento, se basan en un alto nivel de individualización, como por ejemplo:
- El "Frailty Intervention Trial", dirigido a la fragilidad prediscapacitante, propone una intervención multicomponente "a la carta" basada en dominios alterados
- El abordaje DICE (describe, investigate, create, and evaluate), para el manejo de trastornos neuropsiquiátricos (o de "conducta") asociados a la demencia, se basa en un proceso de "codiseño" individual con los cuidadores del paciente
Tengo el objetivo descarado que estudiantes de medicina brillantes se apasionen por la geriatría, porque a nuestra sociedad le hace falta. A menudo, sabiendo que aspiran a la excelencia, o que su unidad de medida pueden ser series como el Dr. House, les remarco que tratar personas mayores puede ser más complejo que hacer sencillamente de médico, ya que requiere saber mucha medicina, conocer y contextualizar la evidencia, saber evaluar la fragilidad, dominar habilidades no técnicas (comunicativas, etc), y a menudo ser flexibles en las decisiones. Si lo consiguen, ninguna máquina los podrá sustituir en diagnosticar o tratar, a corto plazo. Pero para aquellos que aspiran a hacer mucho dinero, mejor que opten por otra solución!
Foto: Kasparov Vs Deep Blue
Excelente comentario de Marco que refleja muy bien la realidad. La medicina geriátrica aporta alta eficiencia sin necesidad de caros recursos tecnológicos.
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