Nacho Vallejo
A propósito de la experiencia en el Hospital de Emergencias Covid-HUVR de Sevilla
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John P. Kotter es economista, profesor de Harvard Business School y experto en gestión del cambio. En una de sus últimas publicaciones, Accelerarate, aborda como suele ser la evolución de los modelos organizativos en el mundo empresarial. Kotter explica que cuando las instituciones abandonan la etapa de gestación y desarrollo se perfeccionan hacia la eficiencia olvidando la importancia de mantener la agilidad en la estrategia. Y en este escenario, cuando surge la necesidad de enfrentarse a nuevos retos o cambios, es muy probable que la acción termine en fracaso al valerse de estructuras, procesos o métodos útiles en el pasado, pero que se adaptan peor a entornos como los actuales, rápidamente cambiantes. La COVID-19 nos ha dejado numerosas lecciones sobre esta idea en la transformación que hemos vivido en nuestras organizaciones sanitarias. En esta entrada nos gustaría aportar nuestra experiencia: la visión del profesional en la puesta en marcha y desarrollo de la actividad asistencial en un nuevo hospital durante la pandemia y la búsqueda de nuevas formas de organizarnos.
En Andalucía, en el mes de febrero de 2021 tuvo lugar la apertura de este nuevo centro asistencial, dependiente del Hospital Universitario Virgen del Rocío y con la denominación de Hospital de Emergencias COVID. Esa ha sido la referencia que ha recibido el antiguo Hospital Militar de Sevilla tras la obra de recuperación parcial del edificio. Inicialmente nace para dar respuesta provincial a la pandemia, aunque conforme disminuye la presión de la hospitalización ha ampliado su uso, lo que ha permitido incorporar la atención a otras necesidades sanitarias. En una primera fase, el edificio ha contado con tres plantas de hospitalización (141 camas), UCI (25 camas) y los servicios intermedios habituales. Se trata de un centro sin urgencias, pero que trabaja y se coordina con las urgencias del resto de hospitales de la provincia de Sevilla. Actualmente sigue en crecimiento incorporando nuevas áreas asistenciales.
A pesar del sabor agridulce de la apertura de un hospital para la COVID-19, sus trabajadores hemos tenido la oportunidad y la responsabilidad de disponer de “un lienzo en blanco” donde entre todos poder orientar la tarea, dando respuesta a los retos locales de nuestro sistema de salud, a las necesidades de nuestros pacientes y apostando por hacer realidad desde el primer momento aquello de actuar con más trabajo en equipo.
Aprovechando las bondades aprendidas con los equipos multidisciplinares que fraguamos en el Hospital Virgen del Rocío durante el primer año de la pandemia, hemos apostado por una organización de los nuevos espacios asistenciales para la atención de los pacientes con COVID-19 según complejidad de cuidados y no por unidades o servicios (también cuando hemos incorporado posteriormente otros perfiles de pacientes). El liderazgo de la atención en la planta de hospitalización corresponde a nuestras enfermeras y ha sido apoyado por la especialidad clínica con mejores competencias según las necesidades de las personas hospitalizadas. Hemos orientado como prioridad desde el primer momento en este modelo la obtención de resultados en salud incorporando las estrategias evaluativas que define The International Consortium for Health Outcomes Measurement (ICHOM) para la COVID-19.
La actividad asistencial se ha vertebrado teniendo en cuenta diferentes puntos de encuentro presenciales y virtuales. Los presenciales, aprovechando el briefing de las enfermeras a primera hora de la mañana. Esta rutina ha tenido su máxima expresión en un área particularmente sensible, el reacondicionamiento de los pacientes con secuelas graves por COVID-19. En ella, clínicos (rehabilitación, medicina interna, infecciosas, neumología, salud mental), psicólogos, fisioterapeutas, celadores, enfermeras gestoras de casos y trabajadoras sociales han trabajado de forma coordinada para atender no solo las circunstancias clínicas, sino también las situaciones de vulnerabilidad que acompañaban a las personas durante el ingreso, facilitando así una mejor recuperación y transferencia de pacientes a su domicilio.
La actividad virtual se ha potenciado mediante la conexión de los trabajadores a una red transversal que nos ha permitido intercambiar información, equilibrar las tareas entre todos los profesionales, hacer transparente la labor diaria de cada uno, apoyar el liderazgo clínico y disponer de un punto de encuentro que genere sentimiento de pertenencia y de trabajo en equipo. También ha sido objetivo de esta red reforzar la continuidad asistencial los siete días de la semana y gestionar la demanda y las necesidades, operando en tiempo real cambios en el modelo organizativo de forma coordinada con el resto de los actores implicados y con el equipo directivo.
Varios han sido los factores que han contribuido a la consecución de estos elementos:
- En primer lugar un sentido de urgencia. Un escenario que nos ha obligado a movilizar y optimizar recursos de forma constante para dar respuesta a las necesidades cambiantes. El modelo de gestión de camas ha sido una prioridad para el equipo. Se ha facilitado el recurso a los diferentes hospitales, coordinando y liderando con los administrativos, celadores, enfermeras y clínicos el dispositivo de ingresos y altas.
- Una vocación de trabajo solidario, de servicio y de cooperación con el resto de los hospitales de la provincia de Sevilla, generando una sensación de equipo más amplio que trasciende los muros de un solo edificio. Las estancias se han optimizado mediante el uso de la telemedicina y las TIC, garantizando la continuidad de la asistencia con cada centro de referencia.
- El sentido de pertenencia y de propósito compartido, que ha facilitado romper con los silos tradicionales en la asistencia sanitaria, no solo entre los clínicos, sino también favoreciendo la incorporación a la toma de decisiones sobre el modelo organizativo de los trabajadores de a pie. Ellos, desde la humildad de su posición, han sido capaces de generar una diferencia positiva en el cuidado de nuestros pacientes hospitalizados.
- La búsqueda de nuevas formas de organización, respetando el modelo de gobernanza del Hospital Universitario Virgen del Rocío, integrando diferentes unidades de gestión clínica en la tarea, pero teniendo presente la transversalidad como herramienta, el aprovechamiento del liderazgo clínico e informal que ha surgido en el centro y generando, finalmente, una idiosincrasia propia con una propuesta organizativa de atención por procesos.
- Un equipo directivo que ha practicado el “management by walking around” (dirigir paseando) lo que ha permitido reducir el gap directivo-profesional gracias a su habitual actitud de escucha, de dejar hacer y de confiar en la labor de los profesionales.
La pandemia, en definitiva, nos ha proporcionado en el Hospital de Emergencias un motivo de reflexión y una apuesta decidida por el cambio desde un modelo habitual de asistencia fragmentada a otro donde hemos priorizado el trabajo multidisciplinar y la organización no por servicios sino por procesos. La búsqueda de indicadores de efectividad y de valor ha sido un aspecto débil del modelo a pesar de nuestras buenas intenciones. La presión asistencial ha dificultado su pleno desarrollo, aunque nos ha proporcionado un marco para la evaluación de la actividad que permite a los profesionales convertirnos en auténticos gestores de los procesos, redefiniéndolos tantas veces como convenga, para conseguir los mejores resultados posibles. En este sentido, nos ha faltado también dar voz a las personas con una mayor incorporación del paciente a la definición de la actividad asistencial.
Queríamos concluir que el liderazgo clínico, la autonomía de los profesionales y el apoyo constante de nuestro equipo directivo nos han permitido avanzar hacia un formato de asistencia que creemos facilita una mayor coordinación y eficiencia en entornos cambiantes. Cada profesional sanitario aporta y todos suman en un modelo de atención que puede ser exportable a otras áreas asistenciales. Hemos contado con una ventaja que podría ser un factor limitante para ser aplicado en otros escenarios: disponer de un espacio físico nuevo, profesionales muy comprometidos y la gran pasión que hemos puesto desde el primer minuto. Nos gustaría incidir en este último aspecto porque nos parece clave para la adaptación de esta propuesta a espacios con culturas más complejas y establecidas.
Dicen Margaret J. Wheatley y Myron Kellner-Rogers que “las organizaciones podrían lograr mucho más si confiaran en la pasión que surge cuando nos conectamos con otros, propósito a propósito. Muchos de nosotros queremos ser más y ansiamos descubrir aquello en lo que juntos podríamos convertirnos". En el Hospital de Emergencias COVID de Sevilla hemos hecho de esta reflexión nuestra principal motivación. Además de los tecnicismos propios de la gestión sanitaria, la verdadera clave de nuestra labor probablemente ha sido compartir un propósito común y poner en valor a cada uno de los trabajadores del centro. Quiero aprovechar estas líneas para agradecer a todas las personas su tarea y el empeño puesto en la búsqueda compartida de un cuidado más amable para todos.
Kotter acierta al hacernos reflexionar que el mundo ha cambiado. Nuestras instituciones no pueden quedarse atrás pretendiendo la ansiada “vuelta a la normalidad”. Aprovechar los cambios que nos ha dejado la pandemia es poner en valor la necesidad de ofrecer un sistema que puede ser mejor para todos. Esperemos que nuestra experiencia en el Hospital de Emergencias COVID-HUVR pueda contribuir a reforzar el motor de los cambios que necesitan, y con urgencia, nuestras organizaciones sanitarias.
Referencias
• Vallejo Maroto I, Aparicio Santos MR, Zurita Castañeda C, Romero Valera A, Mayoral Van Son J, Martínez Hervás L. Experiencia de un área asistencial de reacondicionamiento integral de pacientes hospitalizados en un centro monográfico para la atención de pacientes con la COVID-19. 22 Congreso Nacional de Hospitales. Málaga, 15-17 septiembre de 2021. Disponible en Libro de comunicaciones, página 152.
• Hospital de Emergencias COVID-19: nuevo concepto de Atención al paciente. Visión del Clínico. XXVIII Congreso de la Sociedad Andaluza de Análisis Clínicos y Medicina de Laboratorio. Sevilla 10-12 de marzo de 2022. Vídeo de la ponencia disponible en el siguiente enlace.
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