Acabo de finalizar mi doctorado, que evalúa el impacto de la telemedicina asíncrona en la región de la Cataluña Central, un servicio que está plenamente integrado en el trabajo clínico diario de los profesionales del Instituto Catalán de la Salud desde 2012.

La telemedicina en la Cataluña Central tiene una larga trayectoria, puesto que el primer programa de teledermatología se implantó en l'Anoia en 2007. En mi tesis no he evaluado este programa, que tiene unas características diferentes, sino el que se desarrolló posteriormente en las comarcas del Bages y el Berguedà. En el verano de 2010 se efectuó una primera prueba piloto de teledermatología en la ciudad de Manresa, cuyo éxito clínico impulsó la expansión a toda la comarca del Bages en 2011 y a la del Berguedà en 2012. En este servicio de teledermatología, los médicos de atención primaria toman una fotografía de la lesión dermatológica y la ligan a la historia clínica electrónica del paciente junto con una breve explicación clínica. Nunca se envía ninguna imagen por e-mail para evitar problemas de privacidad. En el hospital de referencia (Althaia de Manresa u Hospital Comarcal Sant Bernabé de Berga), las dermatólogas acceden a la historia clínica electrónica, revisan las imágenes y sugieren un plan de tratamiento y/o acción. A continuación, las profesionales de medicina de atención primaria revisan estas recomendaciones y llaman al paciente para explicarle los resultados. Generalmente, todo este proceso se completa en menos de cinco días hábiles.